La estrella del pop irrumpió en 1999 con un álbum de ingenuidad picaresca en tonos pastel que la llevó a la cima del género. Sin embargo, en el mes de junio su relato ante una jueza reveló los secretos más íntimos de una celebridad que ha vivido asediada por las cámaras de los paparazis. Ningún objetivo fotográfico pudo captar la dimensión del drama que la cantante de 39 años sufre desde 2008 bajo una tutela forzada que recae en manos de su padre, Jamie Spears.
En un inusual y apasionado testimonio, Spears expresó su deseo de que la tutela bajo la que se encuentra desde hace 13 años termine, al calificarla como «abusiva».
A inicio de este mes de julio, Britney Spears, entre lágrimas, arremetió contra su padre por segunda vez en menos de un mes y dijo en una audiencia judicial que quiere que él deje de ser co-tutor de su patrimonio y que sea acusado de abuso de tutela.
«Quiero presentar cargos contra mi padre hoy», dijo Spears a la corte por teléfono, rompiendo a llorar a veces. «Quiero una investigación sobre mi papá».
Así mismo, presentó su petición para renunciar la semana pasada después de que la cantante criticara su representación. El juez aceptó la renuncia de Ingham, junto con la renuncia de Bessemer Trust, una firma de administración de patrimonio que había sido nombrada co-tutora de la herencia del cantante.
Spears, ha contratado como su nuevo abogado al ex fiscal federal Mathew Rosengart, un veterano litigante del mundo del entretenimiento que asistió a la audiencia
Otro hecho revelador de la audiencia del 14 de julio fue que Britney le pidió a la corte que presente cargos en contra de Jamie Spears por abusar de la tutela. «Fui amenazada por mi propia gente. Estaba extremadamente asustada de que mi papá apareciera ebrio. A mi familia nunca le importé», habría declarado Spears en la audiencia, según filtraciones en redes sociales de sus testimonio.
Además agradeció a sus fans por animarla a hablar. «Son fuertes y muy especiales. Es gracias a ellos que estoy aquí y tengo la fuerza para hablar contra mi familia que me ha silenciado a mí y a ellos durante años», dijo la artista.
El nuevo abogado de Britney Spears pidió al padre, Jamie, que renuncie voluntariamente a ser el tutor del patrimonio de la cantante. Durante las primeras declaraciones públicas en nombre de Britney, dijo que esto era «en el mejor interés» de su clienta.
La figura de tutela como está concebida en el caso de Britney usualmente es para personas con enfermedades incurables o próximas a la muerte, por lo que no es usual que alguien pida terminarla. Todo quedará en las manos de un juez que deberá decidir si Britney está en condiciones óptimas para poner fin a la tutela.
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