En Rogue One, dirigida por Gareth Edwards, una de las escenas más emotivas de los últimos episodios de la primera temporada se centra en Jyn Erso (Felicity Jones) viendo un holograma pregrabado de su padre, Galen Erso (Mads Mikkelsen), quien revela que él ha «sentado las bases de [su] venganza” contra el Imperio.
Atención: lo que sigue es un spoiler de la serie, si no quieres arruinar lo que estás viendo en la serie, no continúes esta lectura.
Jyn se entera de que a través de la venganza de su padre, él también se sacrificó por una causa que cree que algún día liberará la galaxia: la Rebelión. Y ahora, somos testigos de una escena similar en el final de Andor, titulado «Rix Road», la madre de Cassian (Diego Luna), Maarva Andor (Fiona Shaw), aparece ante toda la ciudad de Ferrix también a través de un holograma pregrabado, y su hijo está escuchando sus palabras: «Si pudiera hacerlo de nuevo, me levantaría temprano y pelearía contra estos bastardos».
El creador de Andor, Tony Gilroy, ha representado muchos momentos a lo largo de la serie donde el arco del personaje de Cassian se ha reflejado en el de Jyn de Rogue One. Ambos comienzan como antihéroes, valiéndose por sí mismos, siempre huyendo y preocupándose no por una causa mayor, sino solo por su supervivencia.
A medida que avanzan Jyn y Cassian, los horrores que presencian y la brutalidad de la que se convierten en víctimas hacen que les resulte muy difícil continuar haciendo la vista gorda hacia la «bandera imperial que reina en toda la galaxia».
Pero lo que es aún más difícil de ignorar para Cassian y Jyn son las personas inspiradoras que conocen, que se oponen firmemente al Imperio y que dedican sus vidas a luchar contra él. Aún así, el deseo de Cassian y Jyn por su propia libertad parecía mucho más fácil de lograr en comparación con la adquisición de una liberación de toda la galaxia. Entonces, ¿por qué molestarse en arriesgar el cuello? La respuesta a esa pregunta es el amor. Aunque las brújulas morales de Cassian y Jyn cambiaron lentamente a lo largo de sus viajes, es el amor que tienen por sus padres lo que solidifica sus caminos con la Rebelión.
Los hologramas de Maarva y Galen son chispas de rebelión
Los hologramas de Maarva y Galen son paralelos. Describen la creciente amenaza del Imperio, una amenaza de la que Galen creía que podía esconderse resignándose a la vida de un granjero. Una amenaza sobre la que Maarva ha estado durmiendo, una amenaza de la que se ha estado «alejando» porque es una amenaza que tiene una verdad que «no quería enfrentar». Pero a través del amor que Galen tiene por Jyn, y el amor que Maarva tiene por Ferrix, y por poder, Cassian, su esperanza se revela. Maarva revela que en sus «horas menguantes» la consuela la esperanza de que Ferrix continúe, que su gente se una y enfrente cualquier desafío. De manera similar, Galen se entrega al Imperio para que Jyn también tenga la oportunidad de continuar, y le dice durante su holograma: «Trato de pensar en ti solo en los momentos en que soy fuerte».
Las palabras finales de Maarva están destinadas a inspirar
Junto con la fuerza de Maarva y Galen, que se basa en sus seres queridos, viene su fe indispensable en la Rebelión. Galen «desempeñó el papel de un hombre derrotado que se resignó al santuario de su trabajo», todo en nombre del bien mayor. Estaba dispuesto a morir con la esperanza de que alguien activara la trampa que tendió en las entrañas de la Estrella de la Muerte. Maarva tampoco temía a la muerte, y utilizó su funeral ampliamente difundido no para celebrarse a sí misma, sino para oponerse abiertamente al Imperio e inspirar a la gente de Ferrix a hacer lo mismo. El holograma de Galen concluye con una poderosa declaración: «Cualquier explosión presurizada en el módulo del reactor desencadenará una reacción en cadena que destruirá toda la estación». Desde cierto punto de vista, las últimas palabras de Maarva son muy parecidas: «¡Lucha contra el Imperio!» La gente de Ferrix había estado sentada como explosiones presurizadas bajo la tiranía del Imperio, pero el audaz anuncio de Maarva desencadena esa reacción en cadena y la gente de Ferrix corre hacia los imperiales como toros furiosos.
Pero en medio de todo el caos, nos concentramos en los hijos de estos dos valientes individuos holográficos. Cassian y Jyn escuchan las palabras de sus padres con lágrimas en los ojos, porque de repente se han detenido y sus destinos aparecen ante ellos, presentados de manera tan simple por sus padres. El mayor propósito de Cassian y Jyn, «ya estaba ardiendo», pero fueron Maarva y Galen quienes les dieron ese empujón final hacia la Rebelión porque sabían que sus hijos estaban destinados a convertirse en «fuerzas imparables para el bien».