Una serie que mezcla suspenso, memoria y verdad
Con un enfoque profundamente humano y un estilo narrativo que no teme al horror, «Dignidad», la nueva serie de HISTORY2, se convierte en una pieza esencial para entender uno de los episodios más oscuros de la historia reciente de Chile: los crímenes de Colonia Dignidad. Esta producción chileno-alemana revive el legado de impunidad que durante décadas protegió a Paul Schäfer, el líder de una secta alemana establecida en Parral, a través de una historia de suspenso protagonizada por Marcel Rodríguez y Antonia Zegers.
La serie se estrena este 22 de junio a las 21:50 (hora Colombia) por HISTORY2 y estará también disponible bajo demanda. Con una narrativa que alterna entre 1976 y 1997, el relato explora los abusos sistemáticos cometidos dentro de la colonia, sus vínculos con la dictadura de Pinochet y la lucha de un fiscal por obtener justicia a pesar de los poderosos intereses que la blindaban.
¿Quién fue Paul Schäfer y por qué Colonia Dignidad causa tanto impacto?
Paul Schäfer, ex enfermero del ejército nazi, fundó Colonia Dignidad en 1961 con la fachada de una comunidad benefactora. Pero tras sus muros se escondía una estructura de poder basada en la esclavitud, el abuso infantil, la tortura y la manipulación psicológica. El enclave operó con impunidad durante más de 40 años gracias a su alianza con el régimen militar y el desinterés de gobiernos democráticos posteriores.
La serie se centra en Leo Ramírez (interpretado por Marcel Rodríguez), un joven fiscal que, tras vivir en la colonia de niño y ser víctima de Schäfer, regresa en 1997 decidido a derribar el sistema de protección del líder de la secta. Sin embargo, el hallazgo de un joven que asegura ser su hermano Pedro -supuestamente muerto en la infancia- desencadena un conflicto aún más profundo y personal.
Dignidad no solo se detiene en los abusos sexuales y psicológicos, sino que revela cómo Colonia Dignidad sirvió como centro clandestino de detención durante la dictadura, armando un sistema de vigilancia y represión incluso más sofisticado que el estatal. En palabras del historiador Cristóbal García-Huidobro, «es una herida abierta en la memoria chilena que sirve como recordatorio de que los monstruos están siempre a la vuelta de la esquina».
Una producción comprometida con la memoria y la justicia
La serie fue creada por María Elena Wood y Patricio Pereira, y dirigida por Julio Jorquera y Nancy Rivas. Se filmó parcialmente en la actual Villa Baviera, el mismo recinto donde ocurrieron los hechos, lo que aporta un nivel de realismo escalofriante. Para los actores, el rodaje fue un ejercicio de inmersión emocional y ético.
Marcel Rodríguez declaró que su interpretación de Leo fue un reto personal y profesional: «Leer, escuchar a las víctimas y pisar el lugar donde ocurrió todo te transforma. Me motivó a romper el silencio y ayudar a abrir la conversación sobre lo que aún no se ha trabajado del todo en Sudamérica».
Por su parte, Antonia Zegers, quien da vida a la detective Pamela Rodríguez, describió su personaje como «los ojos del espectador, una mujer sin poder que acompaña una lucha imposible desde la convicción». La actriz también reconoció la complejidad de filmar en un lugar donde el pasado aún habita: «Ese sitio debería ser un memorial, pero sigue siendo un centro turístico. Hay un conflicto ético profundo».
La ficción está basada en una extensa investigación que incluyó archivos judiciales, entrevistas con sobrevivientes y el acceso a testimonios inéditos. La serie no solo entretiene; interpela, informa y abre espacio al debate social. «Sin justicia, nunca habrá dignidad», sentencia Wood, resumiendo el corazón de la historia.

¿Puede el arte ayudar a sanar una herida tan profunda?
«Dignidad» plantea una pregunta inquietante: ¿Cómo reaccionamos cuando el horror está frente a nosotros? A través de sus personajes, la serie explora el poder de la empatía, la lucha contra la impunidad y la necesidad de recordar para no repetir. La narrativa atrapa como un thriller, pero deja una marca duradera como testimonio histórico.
El estreno de la serie coincide con una nueva etapa en la memoria chilena: el Presidente Gabriel Boric anunció en junio de 2025 un plan de expropiación de terrenos en Villa Baviera para convertirlos en un sitio de memoria. Este gesto político confirma la relevancia de producciones como Dignidad, que trascienden la pantalla y se convierten en herramientas de reflexión colectiva.