El nuevo spin-off de NCIS titulado Origins trae consigo uno de los arcos narrativos más intensos y personales de toda la franquicia. La primera temporada se sumerge en los años iniciales de Leroy Jethro Gibbs, justo después de la devastadora pérdida de su esposa e hija, lo que lo empuja a adentrarse en el NIS (Servicio de Investigación Naval) para lidiar con sus propios demonios y buscar justicia. Los fanáticos de la serie saben bien que el asesinato de la familia de Gibbs es una herida profunda en su historia, una herida que no ha cerrado del todo, incluso después de tantos años.

Para quienes siguen a Gibbs desde sus primeras apariciones en NCIS, esta nueva serie es una oportunidad para ver un lado más joven, vulnerable y vengativo del personaje. Los creadores han prometido revelar momentos clave de su vida que aún no se habían explorado en la serie principal. La pregunta que flota en el aire es inevitable: ¿se enfrentará finalmente a Pedro Hernández, el asesino de su familia?

El dolor que forjó a Gibbs

Leroy Jethro Gibbs, interpretado por el icónico Mark Harmon, es conocido por ser un hombre de pocas palabras, pero de acciones contundentes. Esta figura se ha vuelto casi legendaria en la cultura pop, en parte por la profundidad que los guionistas le han dado al doloroso pasado del personaje. En NCIS: Origins, veremos cómo los trágicos eventos de su vida personal moldearon al líder reservado y fuerte que conocemos en la serie principal.

La serie, disponible en Paramount+, narra cómo Gibbs lidia con su dolor al unirse al NIS, tomando su tragedia personal como motivación para impartir justicia. Con una dirección más oscura y enfocada en los traumas del personaje, Origins muestra el inicio de su camino de venganza y redención. Esta premisa ha logrado enganchar a los fanáticos de la serie que desean comprender los motivos detrás de la personalidad y métodos de Gibbs, siempre disciplinado pero con una ira contenida.

La obsesión de Gibbs: ¿Habrá una confrontación?

Para Gibbs, Pedro Hernández representa mucho más que un criminal común. Él es el símbolo de la injusticia que le arrebató a su familia y le quitó su paz. Si bien en NCIS se han mostrado algunos destellos de este oscuro episodio, la nueva serie pretende ahondar más en esta parte no contada de su vida. Pero, ¿realmente llegará el momento en que Gibbs y Hernández se enfrenten cara a cara?

La expectativa de ver a Gibbs confrontando a Hernández ha sido parte de la especulación de los fans por años. A través de Origins, los guionistas buscan cerrar este capítulo en un arco que promete tensión y emoción, llevando al personaje a un punto de no retorno. La serie insinúa que esta confrontación no será sencilla ni directa, ya que Gibbs, aún joven y en proceso de encontrar su lugar en el NIS, no cuenta con los recursos ni la experiencia que más tarde tendrá como agente experimentado en NCIS. Este encuentro podría redefinir el personaje y marcar un antes y después en su vida.

La expectativa de los fans por descubrir el desenlace

A medida que avanza la temporada, los episodios han logrado una gran recepción entre el público, quienes ahora esperan impacientes que se muestre ese inevitable encuentro. ¿Tomará Gibbs justicia por mano propia o dejará que la ley actúe? Esta tensión entre el deber y el deseo personal de venganza es uno de los grandes atractivos de la narrativa de Origins. La serie presenta una dualidad en el personaje: ¿seguirá Gibbs el camino de la justicia o permitirá que su dolor personal lo lleve a cruzar los límites éticos?

La posibilidad de ver a Gibbs, joven y lleno de furia, enfrentando a Hernández, mantiene a los seguidores de NCIS al borde de sus asientos. El desarrollo de esta historia podría, finalmente, revelar detalles que expliquen la transformación del personaje en el líder imperturbable que todos conocemos.

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