Le Venz es el proyecto musical de Luis Sojo, un artista nacido en Venezuela y actualmente radicado en Costa Rica que vive para el arte en cualquiera de sus formas y que tiene en la música su terapia emocional, convirtiéndolo en un ser humano sincero y orgánico cuando se trata de plasmar sus letras. Como artista, Le Venz cuenta su historia de vida y su visión de mundo desde aspectos emocionales y humanos, empleando temas intimistas cercanos a él; haciendo que sus letras y música sean composiciones honestas.
El proyecto nace a partir de años de introspección acumulados desde su infancia cuando solía escuchar por horas los acetatos de salsa, rock y pop barroco que su papá coleccionaba. En su adolescencia compró su primer guitarra y comenzó a descubrir su voz que más adelante logró potenciar en academias de canto. Ya en su etapa adulta, descubrió su vocación en el arte y empezó a componer letras y canciones que se han convertido en un medio auto terapéutico y hasta auto confrontativo.
«Procuro que mis canciones sean terapéuticas para mí mismo, que me den respuestas que ando buscando y que me ayuden a entenderme mejor como ser humano. Mis canciones siempre van a contar con este aspecto emocional que pueden transmutarse en servir a las personas que me escuchen, que anden buscando esas palabras que necesitan oír o que simplemente sea ese ritmo que su cuerpo necesita sentir»,cuenta el artista con influencias rock indie, rock espacial y atmosférico, pop barroco, pop contemporáneo alternativo, balada pop latino, R&B, música llanera, folclórica venezolana, andina y electrónica.
‘Volátil’ es una canción que menciona aquellas palabras que quedaron por decir después de una ruptura emocional, es un sentir nostálgico después de los desenlaces amorosos que todos han vivido alguna vez. A su vez, tiene un sentido de superación personal donde los amigos y el amor propio tienen un papel fundamental.
«Quise crear una canción sin percusión que fuese voz, piano, guitarra y cuatro venezolano para crear una atmósfera rica y un mensaje puro y honesto», menciona Le Venz.
El video lyric se hizo a partir de fotos tomadas en Ciudad de México durante un viaje que el artista tuvo e incorpora una paleta de colores y efectos visuales que ayudó a tener un concepto estético apuntando a las fotografías Polaroid.
‘Ni de aquí, ni de allá’ comenzó siendo un trabajo de introspección y retrospectiva para exponer temas cognitivos críticos en su infancia y adolescencia. La disociación de identidad transmutó a un trabajo de investigación donde Le Venz conoció la historia de vida de personas migrantes, residentes y naturalizados que dejaron abruptamente su lugar de origen por situaciones de violencia doméstica, dictaduras y machismo, y buscando mejores oportunidades socioeconómicas en pro de la libertad individual.El sonido es orgullosamente latino, inspirado desde el llano venezolano hasta los Andes. El video tiene elementos muy sudamericanos como el caballo y el poncho que nos transporta a los llanos típicos de la región.
’27’ es una canción con mucha simbología como el mismo número lo indica (hasta existe el famoso club de los 27). Siempre hay un año que marca a las personas y en el que hay que decirle adiós a muchas cosas para poder crecer. Un año que muestra nuestra versión más rota, pero a su vez la versión más fuerte. Es una canción muy emocional en donde Le Venz aborda temas personal ese intimistas como su familia, sus recuerdos de niñez en Caracas y cómo en su etapa actual siendo adulto se confronta a sí mismo esforzándose por superar sus miedos, ansiedad y depresión; buscando lo que lo hace feliz y yendo tras mis sueños.
El video tiene colores cálidos que evocan una cercanía con Le Venz. Hay fotos de sus padres y abuelos que son parte de ese recuerdo nostálgico. El clip termina con un audio de la voz de su tía Inés en modo de tributo, pues ha sido una inspiración artística en su carrera.
«Las personas me cuentan que uno de los mejores momentos para escuchar mi música es en las noches cuando llegan a casa y solo quieren cerrar los ojos, reflexionar sobre sí mismo y darse esa auto terapia musical en donde sienten que alguien los entiende; donde Le Venz les habla y les dice esas palabras que ocupa su sentir»,enfatiza el músico.
Le Venz sigue creando música y publicando canciones. El artista planea tres lanzamientos con gran influencia latina: un bolero donde combina el aire clásico del trío de voces junto a elementos pop y trap, una bachata con notas de trap y efectos de violines en su coro y una canción alegre de verano, caribeña y con mucho tumbao.
«Mi expectativa es que, así como estas canciones me sirvieron para auto curarme y entenderme mejor como persona, le puedan servir a todos los que me escuchen. Siempre he tenido la convicción que el arte, cuando se hace desde lo más sincero, trasciende.Amo la sensación cuando escuchamos una canción que nos habla tan directo y nos llega tan profundo que nos eriza la piel y pasamos todo el día cantándola», concluye.
Sobre Le Venz
Cuando Luis Sojo era niño solía escuchar los acetatos de Héctor Lavoe con su papá, quien era un gran amante de la salsa. Años después empleó el nombre Le Venz como un homenaje a sus primeros años que fueron esenciales donde descubrió su amor por la música escuchando a Lavoe. El significado de Le Venz es una abreviación en francés ‘Le Vénézuélien’ tal como Héctor empleó su nombre en francés.
Al tener influencias desde los géneros barrocos y caribeños de los cuales vive orgulloso,Le Venz se reinventa como artista en cada una de sus obras, siempre buscando un ritmo sensorial y único que haga sentir la mente y el cuerpo vibrar, que muestre el orgullo artístico latinoamericano y que en las letras se pueda encontrar un poco de su identidad.